Seguidores

domingo, 9 de octubre de 2011

#.

No hay un por qué, ni siquiera una razón, pero sí un momento, un instante, un segundo para que todo llegase a ser totalmente mágico, irreal, que pudiera en ese momento pararse todo, y solo mi corazón fuera quien siguiera latiendo incluso.. a mil por hora, que mi mirada no quisiera ni pestañear por si perdía algún detalle de aquel precioso momento, y todo esto sentí cuando te besé.

No hay comentarios:

Publicar un comentario